El acercamiento



En este tiempo en el que nos toca vivir, tan rápido, tan exigente y otros tantos "tan" que alteran nuestro ritmo de vida hasta el punto de hacernos enfermar. He querido crear este blog con el fin de poder ayudar en la medida de lo posible, a todas aquellas personas que estén en este punto.
Muchas veces resulta complicado ir al psicólogo y explicarle lo que nos está ocurriendo, pero por otro lado necesitamos ayuda para volver a sentirnos tranquilos, serenos y sanos, por esta razón doy la posibilidad de mantener consultas vía Internet, aunque si alguien prefiere la clásica consulta no hay ningún inconveniente.
El papel del psicólogo es profundizar en el caso de cada persona y ayudar a ésta a comprender los mecanismos que determinan sus preocupaciones y el consecuente malestar, para aprender a controlarlos e incluso hacerlos desaparecer.
Comencemos pues.

sábado, 10 de septiembre de 2011

Cuando el mundo nos agobia

Hay momentos en los que ya no podemos más, nuestra mente y nuestro cuerpo nos dicen que hasta ahí han llegado, pero antes de este punto drástico, donde nos surgen las enfermedades, si nos fijamos un poco ya hemos tenido algún síntoma que nos pronosticaba lo que iba a ocurrir, pero como estábamos tan ocupados agobiándonos con lo que se nos venía encima, no nos dimos cuenta hasta el último momento.
En muchas ocasiones nos han enseñado a soportar hasta límites que ni si quiera nosotros mismos pensábamos que podríamos soportar, pero claro, las consecuencias son fatales.
Aunque de vez en cuando podamos estallar con alguna mala contestación o con un comportamiento que casi ni nos reconocemos, seguimos aguantando, es como si lleváramos una mochila y de vez en cuando sacásemos algún objeto de ella, pero seguidamente seguirán entrado cosas a ocupar ese pequeño espacio que se ha creado.
Es una continua presión que va aumentando paulatinamente hasta que llega un momento en el que rebasa nuestro limita provocando ansiedad, estrés, depresión...todas estas cosas que por fortuna pueden resolverse por medio de un trabajo continuado, que no es fácil pero que se puede lograr.
Uno de los puntos importantes es que antes de haber podido solucionar un punto que nos está empezando a hacer daño, ya hay otro nuevo, de este modo se van acumulando, entramos en una espiral donde nuestras emociones se van conduciendo hacía el barranco de la desesperación.
Cuando te encuentras en esta situación y te comentan: "sólo necesitas tomar el control". Y es cierto, pero lo primero que llega a tu cabeza es algo así como, "si claro, es muy fácil decirlo, pero si te encontraras en mi lugar verías que es misión imposible". Y es verdad, ambos tienen la razón, cuando te encuentras sumido en una profunda tristeza, o frustración o malestar...cuando no estás tranquilo y equilibrado, cualquier cosa que te digan parece imposible de lograr, imposible de soportar, pero con una serie de pautas se puede conseguir. Bueno, con pautas y constancia, siendo consciente que al principio no se puede subir mucho el listón, no porque no seas capaz sino porque en la situación emocional que te encuentras resulta mucho más complicado realizar cualquier cosa.
Hay momentos en los que parece que vas controlando todo y llega otro "estresor" por otro lado, algo que no tiene nada que ver con tu problema principal o con el que estas trabajando y  ¿cómo reaccionas?, pues fatal, te da el bajón de tu vida y sientes que no sólo no has avanzado nada sino que has ido a peor. En lugar de quedarte en ese punto de desmoralización profunda, respira y piensa que si has podido avanzar antes, ¿por qué no vas a poder hacerlo ahora?. No digo que sea fácil, la buena noticia es que se puede.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Conflictos personales

Aún siendo conscientes de que vivimos en sociedad, es muy importante no olvidarnos de que somos seres individuales. ¿Qué quiero decir con esto?, sencillo. Muchas veces anteponemos las necesidades de los demás a las nuestras, pudiendo llegar a ser un hábito con consecuencias negativas.
No consiste en fomentar el ser egoísta o egocéntrico, ni mucho menos, pero sí sería bueno tener clara nuestra escala de valores, al igual que el respeto al prójimo. 
A lo largo de nuestra vida tenemos tiempo para pasar por diferentes momentos y algunos de ellos pueden ser bastante duros y difíciles de llevar, repercutiéndonos en nuestra vida diaria.
Un suceso determinado o un cúmulo de ellos pueden llevarnos a estados depresivos o incluso podemos llegar a sentir que no hay solución posible para salir de ese círculo donde nos encontramos, podemos llegar a estar profundamente convencidos de no tener fuerzas para continuar hacía delante, pero es importante saber que incluso encontrándonos en esos momentos tan derrotistas, siempre hay posibilidad de cambiar las cosas y si no podemos hacerlo nosotros mismos por sentirnos bloqueados o desesperanzados, puede haber alguien que nos tienda la mano para ayudarnos, sólo se necesita que nosotros se la cojamos.
A mi me gustaría tenderte esa mano, si tu quieres claro está, y poder ayudarte.